Gracias a los audífonos la vida de millones de personas ha cambiado de manera radical. A través de los mismos pueden volver a recuperar buena parte de la pérdida de audición que sufren. De esa manera, pueden hacer una vida lo más normal posible y en consecuencia adaptarse a su entorno con facilidad.
Si usas o vas a usar un audífono es importante que conozcas bien cuales son las principales partes del audífono. Así le podrás sacar mucho más partido. Para que la información que te vamos a mostrar sea de la máxima calidad posible nos hemos puesto en contacto con los expertos en audífonos de https://www.audifonos.es/. Con su colaboración no solo hemos conocido las principales partes del audífono, también hemos obtenido información de cada una de esas partes.
1- Micrófono
Es una de las partes más importantes del audífono. Hasta hace poco era común que los mismos sólo contaran con un micrófono, pero a día de hoy hay modelos que ya cuentan con un par de ellos. El objetivo del micro es captar el sonido para posteriormente enviar la señal al auricular. Esa señal siempre se envía a un amplificador para que el auricular pueda hacer su función.
El micrófono puede estar localizado en diferentes sitios, todo dependerá del modelo de audífono por el que apostemos. Lo que está claro es que el micro es fundamental a la hora de conseguir que la gestión del sonido sea buena. Si el micrófono no funciona bien, no se podrán captar bien los sonidos y eso hará que la calidad de la audición no sea buena.
Por supuesto, para que el micrófono haga bien su función, el mismo siempre tendrá que estar en buen estado. Es vital que esté limpio y seco.
2- Procesador digital
Esta parte del audífono puede parecer secundaria, pero es más importante de lo que parece. Tiene como objetivo transformar las señales eléctricas del micrófono en señales digitales. Dependiendo de las necesidades reales de la persona, el procesador digital tendrá que realizar una transformación u otra.
Para que te hagas a la idea, el trabajo fundamental del procesador digital es amplificar las frecuencias o reducir los sonidos exteriores. Se programan para conseguir que presten más atención a las voces principales que a los sonidos exteriores. Al eliminar los ruidos es más fácil comprender lo que se está comunicando.
3- Receptor
Es otra de las partes importantes del audífono. Esta pieza tiene como tarea convertir la señal eléctrica en señal acústica. Esa señal luego es enviada a través del canal auditivo para que el proceso la pueda captar y procesar correctamente. Es importante que el trabajo sea de calidad para que el cerebro pueda recibir la señal y procesarla correctamente. Si el receptor no hace bien su trabajo, la señal no podrá ser comprendida por el cerebro.
Para que la compresión sea de más calidad, el audífono lo que hace es mejorar las ondas sonoras. Cuanto más clara sea la información enviada, más fácil será de comprender. Al fin y al cabo, lo que se busca es que el cerebro pueda comprender correctamente la información que se le está mandando.
A la hora de examinar el receptor, podemos ver como el mismo tiene un aspecto bastante parecido al del micro. En cuanto a su localización, depende directamente del modelo. Algunos audífonos lo tienen situado en el canal auditivo, mientras que otros lo tienen en un tubo que suele ser transparente. Hay muchos modelos y cada uno lo tiene situado en una zona determinada.
4- Control de volumen
Es una pieza fácil de comprender y de usar en la gran mayoría de audífonos. En este caso la pieza tiene la tarea de permitirnos controlar la intensidad de los sonidos. Así se puede adaptar el volumen del sonido y en consecuencia saber si realmente interesa subir o bajar el volumen dependiendo del entorno en el cual se encuentre la persona que está usando el audífono.
5- Tubo conector
Es el encargado de transmitir los sonidos al auricular receptor o al molde. Normalmente suele destacar por ser un tubo fino y transparente que pasa desapercibido. Aunque como hay modelos para todo tipo de gustos, los tubos están cambiando los colores en algunas ocasiones.
El tubo suele durar bastante, pero como es de plástico no tendrá la misma vida útil que el propio audífono. Eso significa que es normal con el paso del tiempo tener que cambiarlo por uno nuevo. Por suerte, el cambio es fácil y no es para nada caro.
De nuevo, dependiendo del audífono del que hablemos, el tubo estará situado en un sitio o en otro. Para conseguir una buena experiencia siempre debemos optar por un modelo que se adapte a nuestras necesidades. Así podremos tener la certeza de que todas nuestras necesidades quedarán cubiertas.
6- Auricular
También es conocido como el molde del audífono. Es la parte que se encuentra justo en el canal auditivo y se encarga de transmitir el sonido al oído.
Los auriculares suelen estar fabricados en plástico, aunque también podemos encontrarlos en otros materiales como acrílicos. En cuanto a las necesidades del usuario, el tamaño y la forma pueden variar. Como puedes imaginar, a mayor necesidad de audición, mayor será el tamaño. Lo importante es que cada persona puede tener el modelo que mejor encaja con sus necesidades.
7- Zona de la batería
Es otra la zona donde se encuentra situada la batería que da energía al audífono. Dependiendo del modelo elegido, en esta localización se puede encontrar la batería o la pila. Los modelos más modernos suelen ofrecer batería para recargar, aunque todavía hay modelos que optan por la pila.
Quiero dejar claro que los modelos que funcionan con batería necesitan ser recargados todas las noches para tener autonomía para el día siguiente.
8- Molde
Los moldes en la gran mayoría de ocasiones suelen ser a medida para conseguir un buen ajuste a las necesidades del paciente. Gracias a que es a medida se puede adaptar muy bien al pabellón auditivo de la persona y así conseguir que el mismo se pueda llevar con más comodidad.
El molde tiene dos funciones. Una de las principales es conseguir la ansiada estanqueidad acústica. Pero también tiene el objetivo de ajustar acústicamente el dispositivo al oído.
Es verdad que todo esto puede parecer muy complejo y con muchas piezas, pero la realidad es muy distinta. Es importante dejar claro que el profesional dejará siempre el audífono listo para ser disfrutado, es decir, tú como paciente no te tendrás que preocupar de nada, solo de disfrutar del sonido que vas a obtener.