A pesar de que Linux lleva con nosotros desde hace casi 30 años, lo cierto es que Windows ha ocupado un lugar hegemónico en la jerarquía de sistemas operativos más populares y utilizados por los usuarios. Los últimos datos arrojados demuestran un cambio determinante de tendencia que sitúa a Linux y macOS en auge, mientras la caída de Windows es, por ahora, imparable.
Pero hoy no toca hablar del porcentaje de usuarios medios de cada sistema operativo, ni tampoco de las ventajas que puede presentar cada uno de ellos, eso es algo que dejamos a elección y análisis de cada uno. En este artículo vamos a explicarte qué es OpenVZ, cuáles son sus características principales y en qué se diferencia de KVM, un programa de virtualización similar a OpenVZ con aplicaciones para Linux, Windows y otros sistemas operativos personalizados.
Qué es OpenVZ
Con licencia GNU GPL 2 y basado en Virtuozzo, OpenVZ es, a grandes rasgos, un programa que se utiliza en Linux para virtualizar entornos basados en este mismo sistema operativo, en concreto VPS (Virtual Private Servers, servidores privados virtuales) y EV, entornos virtuales. Lo que hace OpenVZ es crear, en un segmento del sistema anfitrión, un sistema virtual que otorga acceso a un servidor físico propio en el que realizar pruebas o cualquier otro tipo de actividad que sea precisa llevar a cabo en un servidor.
Características y funcionalidades de OpenVZ
OpenVZ se caracteriza por varios rasgos distintivos que vamos a englobar en tres campos informáticos: el referente a la escalabilidad del kernel, la densidad de los entornos virtuales y la administración masiva.
1.- La escalabilidad. OpenVZ utilida un kernel único que es tan escalable como el 2.6, soportando 64 CPUs y hasta un total de 64 GB de RAM. Un entorno virtual único puede escalarse hasta un equipo físico completo, y de hecho es cada vez más común utilizar OpenVZ como un solo EV para sacar más partido de la independencia del hardware, la migración en vivo o la mejor administración de los recursos.
2.- La densidad. OpenVZ es capaz de alojar tantos EV como la RAM y la CPU le permitan. El cálculo proporcional entre la memoria y la capacidad CPU y los EV generados podrá determinar la densidad de trabajo del software y analizar su rendimiento para poder optimizarlo en labores futuras.
3.- La administración masiva. Un root de un servidor físico OpenVZ es capaz de ver todos los procesos y archivos de EV, haciendo posible la administración masiva de escenarios y aplicando actualizaciones de manera simultánea en varios servidores a la vez. En el caso de OpenVZ, es posible ejecutar un script que interprete los comandos para realizar una tarea específica.
Ventajas y desventajas de OpenVZ
El uso de OpenVZ presenta múltiples ventajas en comparación con los equipos que prescinden de él para llevar a cabo tareas de la misma índole. El más obvio es el que tiene que ver con los recursos, ya que OpenVZ apenas consume recursos del host, puesto que la cantidad de memoria RAM a utilizar se le asigna de manera dinámica, de forma que los recursos necesarios se van otorgan en función del momento en el que se vayan necesitando.
Por otra parte, tal y como leemos en el artículo Qué es OpenVZ elaborado por el equipo de TuHosting, la accesibilidad es mucho mayor utilizando este programa porque el sistema aislado creado dispondrá de su propio kernel Linux, virtualizando otros sistemas basados en ese sistema operativo. Además, como utiliza sus propios recursos de manera individual, también dispone de un sistema de ficheros propio: biblioteca de sistemas virtualizados, usuario root, grupos, árbol de procesos, control de entradas y salidas del host, automatización de direcciones IP mediante red virtual y gestión completa de los límites de memoria y usos de la CPU.
Diferencias entre OpenVZ y KVM
La principal diferencia entre ambos programas es la accesibilidad: OpenVZ es más restrictivo, puesto que con él solo pueden instalarse sistemas Linux, y KVM puede alojar Windows, Linux y otros sistemas operativos personalizados. Eso sí, OpenVZ es mucho más económico por sus características intrínsecas, ya que es un software exclusivo por y para Linux.
OpenVZ utiliza un kernel compartido, implementa una capa de virtualización sobre el sistema operativo de Linux utilizado como base y va a ser compartido por todos los servidores que trabajen en el nodo principal, impidiendo su personalización. Superado el umbral de la memoria RAM asignada, esta se comparte con el resto de servidores del nodo, algo que puede acarrear algún que otro problema si se utiliza alguna aplicación de forma intensiva.
KVM ofrece un hardware virtualizado privado con tarjeta de red, adaptador de disco, de gráficos y recursos garantizados, ideal para profesionales, servidores y pequeñas y medianas empresas, pero es mucho menos accesible en este sentido. OpenVZ, a pesar de poder utilizarse únicamente con Linux, cuenta con unas plantillas mucho más amables con el principiante. Eso sí, KMV permite establecer valores mínimos y máximos de los recursos, optimizando el funcionamiento general.
El proceso de virtualización se caracteriza por requerir acceso completo al root, utilizar muy poco la CPU (y, por tanto, sus recursos de capacidad), llevar a cabo la virtualización a nivel de sistema operativo y permitir una configuración mucho más sencilla de la red, además de ofrecer un mayor rendimiento, escalabilidad y dinamización de los recursos.